jueves, 30 de diciembre de 2010
Cemento frío
domingo, 26 de diciembre de 2010
Te buscaré
miércoles, 22 de diciembre de 2010
Nueva vida
martes, 21 de diciembre de 2010
Ahora me acuerdo de que se me olvidó algo
jueves, 16 de diciembre de 2010
Volviendo a casa
martes, 14 de diciembre de 2010
El cincuenta por ciento es siempre más o menos
Es increíble cómo un gesto apenas perceptible es capaz de estrangular como la mejor de las cuerdas de un piano. Tocar sin tocar, herir a metros, kilómetros de distancia. Es el fantasma que hunde sus uñas donde uno no se llega, cuando el frío congela la llama y la convierte en daga o flecha acusadora, dependiendo siempre de la distancia.
Las raíces rojas crecían en el agua a medida que desaparecían mientras mi nariz tragaba con la mayor de las fuerzas la sangre que no había conseguido salir de allí en un intento de regar el cerebro, buscando el colocón perfecto. Fue un acto inconscientemente vital, como respirar. Recuperar la sangre exiliada era imposible pero no empapar mis tejidos con los glóbulos oxigenados que la curiosidad hizo goteras en mi fosa.
Todo vale en el gran juego*, mantener el equilibrio entre fuerza y debilidad era lo único que deseaba. No quería tener más poder del que mi cuerpo me limitaba, es más, anhelaba ese equilibrio. ¿Alguna vez has buscado emborracharte sin pasarte buscando ese estado ebriamente controlable? Algo así busqué, ser lo suficientemente fuerte pero también lo suficientemente débil. Lo quise todo y ahora sólo tengo unas gotas de sangre menos.
*Rudyard Kipling, Kim.
lunes, 13 de diciembre de 2010
Paseando por blogs
sábado, 11 de diciembre de 2010
Mañana
viernes, 10 de diciembre de 2010
Puro teatro
miércoles, 1 de diciembre de 2010
29-11-10
lunes, 29 de noviembre de 2010
La casa (28-3-2010)
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Tanto siempre que nunca nada
martes, 16 de noviembre de 2010
Pasado imperfecto
Y parece que el dolor desaparece, se apaga, emigra gramo a gramo y se va cerrando...
sábado, 13 de noviembre de 2010
Huellas en la lluvia
viernes, 5 de noviembre de 2010
Por la noche
Ella espera y mientras espera va bebiendo su vida y su belleza camuflada en polvos es tan sólo belleza repentina, aparece cuando su novio viene con ella del bar y se diluye a medida que su cerebro la va olvidando, poco a poco, tornando la ilusión en un rostro simiesco con hambre in crescendo que afila sus dientes y escama su piel.
Él vive por ella, la ama y cuida y cuando falla se vuelve loco, se muerde la lengua tan fuerte que sangra, escribe en sus nudillos con cal y sus ojos abandonan su estado natural y se convierten en agujas.
Ambos se engañan.
sábado, 30 de octubre de 2010
300 escritos ya
lunes, 25 de octubre de 2010
Elena
miércoles, 20 de octubre de 2010
Aparte
martes, 12 de octubre de 2010
viernes, 8 de octubre de 2010
Las palmas abiertas
jueves, 7 de octubre de 2010
Zombie
Llegó a casa muerto
del hambre del hombre,
llegó a casa muerto,
sin nombre.
martes, 28 de septiembre de 2010
Un diente roto y pan duro
jueves, 23 de septiembre de 2010
martes, 21 de septiembre de 2010
La bibliotecaria
viernes, 17 de septiembre de 2010
Cuando todo el mundo duerme
viernes, 10 de septiembre de 2010
Colapso
jueves, 9 de septiembre de 2010
Lunes
lunes, 6 de septiembre de 2010
Miércoles
"Los codos van al cielo..." celebrando la muerte del día y el nacimiento de la oscuridad. Y el tiempo apremia a los insolentes que se dejan vencer por el cansancio, mañana no volverá a ser igual, pero nos da igual a todos. Consúmete raudo que los hielos copulan con el licor nocturno y las agujas penetran. Déjate caer a este lado del meridiano y dime que...todo es mentira. Que no fue tu cintura la que me llenó de ira, que nunca giró tanto el mundo para que nos cambiara tanto la vida. Dime que no estuviste allí y que solamente vi una imagen rota que rompió la puerta de la verdad testaruda, dime que volví a jugar a anudar los collares de sal en el mar, nunca más, nunca más…
miércoles, 1 de septiembre de 2010
Viernes
Día tras día...
Cerré los ojos, ásperos de tragar otra noche de roces, de coces que escuecen, de cocerme otro viernes recóndito en el que se pierde el rastro de toda herradura amiga.
Los cerré...
Y la luz murió en un chasquido de párpados azules y lenguas de tierra movedizas. Los brazos fusilados besaron el colchón virgen de eso y los ojos se volvieron al pasado de cara a las entrañas, fue un coma necesario como el comer.
Y ya nada volverá a ser igual, ya nada volverá a ser igual...
domingo, 15 de agosto de 2010
Fotosíntesis
¿Sientes esa herida?
-"Sigues viva".
miércoles, 14 de julio de 2010
Soy el mejor
Los halagos sólo son buenos cuando el que los recibe tiene la inteligencia suficiente como para no quererse a sí mismo en exceso.
jueves, 8 de julio de 2010
domingo, 4 de julio de 2010
Y levantarme siempre a tu lado
jueves, 1 de julio de 2010
Ironía al volante
Casi no quedaba nada de aquel cuerpo reventado en la carretera que velaban los mosquitos con babero. El hueso de la nariz aparecía entre la seca mucosa apuntando al cielo y servía de palillo a las hambrientas gotas negras y rojas. De su vientre salía un puño abierto y agrietado que clamaba al cielo la pregunta que siempre sigue a una muerte accidental, sus costillas dejaron de abrazar a la carne para exhibirse a un público impasible con la mirada fija en el resto del camino.
Volvía satisfecho del trabajo, la paja y el verde eran un paso de cebra natural alejado de los raíles del maquinismo y del alquitrán kilométrico que acaba siempre en cascada hacia destino. Gafas de sol contra Helios, brisa con prisa que entra por un resquicio de la ventana y dedos que replican al son de una canción cualquiera.
Dos mariposas enamoradas de pronto pintan la luna del coche de rojo y blanco.
Algo que parece un gato evaporándose y fundiéndose lentamente con una nube de mosquitos observa tan impasible como el conductor que le mató a la eliminación del amor.
viernes, 18 de junio de 2010
Metátesis casera
Ya no hay nada, ni un gramo de dolor en este último tramo rodeado de espinas de tiranos que minan mi camino. Ya no hay nada,
in quisiera roden…
Ay ya no ha dana, in nugro ma dedo lor nestes timo lutramo adoredo despi nase tiras deno queman ni cano mi mi. Ay ya no ha dana,
ni siquiera orden...
miércoles, 9 de junio de 2010
En otra parte
Últimamente escribo poco y con la letra muy chiquitita.
Antes me salían lobos por los poros y ahora el tiempo tirita…
Recurro a la mirada gélida que se pierde entre las llanuras de una mesa desértica.
No hay signos de oasis.
¿Quieres un oasis? Puedo llorar si quieres.
Sobrevivo a base de recuerdos, es inevitable mirar atrás y a veces me apetece vivir desde donde empezó el camino y lanzar las palabras tan lejos como hoy. Tan lejos como tus oídos ahora que me ves desnudo y me desnudas a cada línea que desabrochas. Escribir lo que pienso sin pensarlo, sin pensar que tú me lees y que eres el protagonista de un sueño fantasma tan frágil como hacer caso a un niño que te dice que ya ha acabado los deberes mientras escribía esto.
martes, 1 de junio de 2010
Las prisas
sábado, 22 de mayo de 2010
Zumo mental
Todos menos los que se van al cine con sus respectivas.
Sólo quiero beber, fumar dejarlo todo pasar y mientras pasa disfrutar de la fruta recién cortada y también de la caduca que con el tiempo nos educa. Mirar a la diana de tus ojos sin miedo y dejar que leas que quiero dejar en tu cuerpo mi adn Antes De Nada y sobre todo ahora.
No quiero ser parte de la marea que nos va borrando el cuerpo lentamente ni del viento que erosiona mis tobillos. El olvido es la última página del libro de nuestra vida y así como toda herida cicatriza nosotros cicatrizamos con ella hasta el fin, sólo espero que mi herida sea bien grande.
Sólo quiero beber, fumar...
jueves, 20 de mayo de 2010
Buenas noches
Como una sábana recién lavada que besaba su mejilla pasó su mano mientras ella dormía, quizás anhelando una caricia similar...
miércoles, 12 de mayo de 2010
Salamanca
Aquí todo sigue igual...siempre digo que la ciudad nunca cambia sino las personas que viven y pasan por ella.
Aquí lo único vivo es el recuerdo de cada uno de ellos que se estampa para siempre en la piedra dorada, hoy bajo el paraguas de un cielo amenazante.
jueves, 6 de mayo de 2010
Contigo sin presupuesto
Cuando haya huelgas por un beso
dame el máximo interés en la fusión de nuestros labios.
Mientras una caricia no tenga precio
llévame a la quiebra con el baile de tus manos.
9º puesto en el certamen de relato corto Ciudad de Cartagena El tamaño no importa, léelo
[ http://wwwe.cartagena.es/concursoMicrorrelatos/ranking.asp ]
jueves, 29 de abril de 2010
Ayer soñé
jueves, 22 de abril de 2010
Dedos eléctricos
Una vez dijeron que mis dedos eran eléctricos. Me enamoré de semejante adjetivo que cautivó mi ego. Soy escritor y borracho. Fumador de almas. Esponja de ojos enjaulados en un cuerpo que no para de moverse en ambientes turbios, nocturnos, seductores y oscuros.
Mis dedos son eléctricos y queman las yemas de la luna llena. Lamen los enjambres y juegan con la aguja que inyecta el placer. Amo la sobredosis de excesos y la copa que llora y siembra de alcohol la barra de cualquier bar. Toco todas las notas con los surcos de mis dedos chispeantes pero no me quiero, no me quiero.
Mis dedos son eléctricos y rasgo con ellos las paredes de un cuarto que me limita. Borro las fronteras que no alcanza vuestra vista y te hago volar. Te quiero seducir sin edulcorantes, como antes de que se inventara el amor. Mis motivos son secretos a voces, son coces que escuecen a mis detractores, actores.
Mis dedos son eléctricos, son pura vida en su máxima expresión. Son golpes con sabor a hueso roto. Mis dedos soy yo, sois vosotros. Seguid dándome motivos para…
domingo, 18 de abril de 2010
Atrás lo dejé, la pena y la escoria, las venas cargadas de gloria que borbotan cadenas montañosas
de puños alzando la voz del escritor por vocación, por bocazas del tirón de bolso que no compensa
el chute en plena pradera limpia y verde, verde como las esperanza de tus ojos que vierten anhelo de un mañana mejor, pero imposible.
martes, 2 de marzo de 2010
Después de leer
En esta ocasión el camino no fue verdaderamente importante, sino el resultado. Después de leer y abonar un té verde que se quedó frío salí a la calle con otra perspectiva de mí mismo. Una sensación rara, sedante y turbia me invadía placenteramente mientras dirigía mis pasos hacia la fachada de la universidad. Miles de líneas aparecían y solamente deseaba escribirlas antes que se secaran, deseaba escribirlas sin apenas digerirlas. Sentía el brazo derecho, el que sujeta la pluma y tanto me ayuda a volar, más caliente que su hermano. Sentía la necesidad de escribir sin saber que aquel efecto duraría apenas unos minutos más. Bajé la calle Libreros mirando al suelo y pensando en el rápido y desgarrador movimiento del cocodrilo que dura escasos segundos, escasos metros. Si el animal lo aprovecha tendrá alimento, por el contrario si su víctima se percata de su presencia y tiene la suerte de huir, el cocodrilo se volverá, cansado por el esfuerzo inútil, al pantano. Mi mente era un cocodrilo que devoraba a cada paso. El único problema fue que no había víctima.
Me giré, alcé la cabeza y observé a la famosa rana incrustada en la calavera. Después de leer aquellas líneas con las que tanto me sentí identificado una parte de mí se apagó momentáneamente, justo el tiempo que duró aquel éxtasis silencioso. Después de leer me sentí incapaz de relacionarme con el resto del mundo, no articulaba las palabras como las suelo articular, me mostré pausado con una mirada tan transparente que no decía nada. Todas las palabras querían hablar de lo que había leído y después del típico “Hola, ¿Qué tal?” tan sólo quería volver a pensar en aquellas letras que unidas han tenido más significado que cualquier bandera.
Después de leer pensé que aquel libro me había leído a mí.
lunes, 1 de febrero de 2010
p a l a b r a s
Tic, tac.
Knock, knock.
Ding, dong.
Hablamos de los dos
mientras, sin darnos cuenta, el tiempo hacía las maletas de ida.
Llamaron a la puerta
pero no hicimos caso.