domingo, 18 de mayo de 2008

¿Vienes o voy?

Hoy volví a casa con jazz en los auriculares, Willie Dixson y su I can´t quit you baby, tranquilo, disfrutando de la vista que la sintetizada luna acetilsalicílica me ofrecía entre cortinas de nubes blancas, casi transparentes. En los bares aplausos de cuero con sabor a victoria lograda varias jornadas antes, pasión etílica y con sabor a humo, demasiadas contrariedades se unen otro Domingo envejecido y cada vez más similar a mí. Vivo demasiado cerca de cualquier lugar y a veces me gustaría caminar largo hasta llegar a una ventana iluminada con forma femenina, sentarme encender un cigarrillo y esperar el movimiento, pero siempre acaba apagándose la luz, y yo a dos velas y con siete colillas arrepentidas en el suelo. ¿Dónde estás? Quizás me haya alejado sin darme cuenta aunque te he dejado besos en la nevera y unos cuantos en el congelador y te los seguiré dejando siempre que pueda para que con su frío te den calor, hasta que lleguemos a intercambiar nuestro propio calor debajo de la manta y hagamos nudos con los dedos de los pies y nos arañemos la boca.
Ven.

1 comentario:

Anónimo dijo...

pronto empezaremos a traficar con la luna,

analgésica, antipirética, antiagregante plaquetaria y antiinflamatoria

aspirina contra el dolor de cabeza que provoca el no saber si vienes o voy, si vas o te quedas, si me quedo yo

y nada cura este frío, ni siquiera los besos que dejaste en la nevera, porque mientras tú fumabas bajo una ventana iluminada con forma de mujer, yo te esperaba debajo de la manta, deshaciendo nudos en mi garganta...

...que es lo que pasa cuando se apaga el jazz y la luna desaparece y ni tú vienes ni yo voy

...que es lo que pasa cuando los besos se descongelan


buenos días, :)