martes, 21 de abril de 2009

Kill me

Mátame con cada palabra en cascada.
Mátame sin paréntesis ni puntos que detengan esta sucesión brillante y afilada que siega la altura de mis anhelos, haz de mí un instrumento oxidado olvidado. Puedes fumarme los dedos y borrarme las huellas de todos ellos salvo el del corazón, es la única huella que aquellas olas no borraron...

1 comentario:

Mila García dijo...

bueno, es morir asesinado pero dulce, muy dulce según lo describes...