lunes, 9 de marzo de 2009

¡Cuánto habría ganado quedándome en la cama!

Hay días en los que es mejor quedarse en casa bajo el calor inconscientemente trabajado durante horas en la misma posición con posibilidad de retozo. Hoy ha sido uno de esos días.
Pillo el coche y a los 5 minutos un anciano de aspecto jovial me da por detrás, es decir, impacta con su cïtroen pitingo de color azul en el extremo derecho trasero de mi coche, (mi coche que comparte mi hermano conmigo y que nos compró mi padre). Del impacto creí que me había metido en un hoyo, miro hacia atrás y ahí están la pareja, su mujer ni se inmutó y yo mientras mirando qué había pasado y buscando los porqués de semejante sacudida, todo esto aderezado con una cola como la de nacho vidal pero en metálico rugiendo con sus cláxones impacientes conductores con boina babeando de rabia que deberían tener todavía una ele cargando en el remolque de ignorancia supina y que no se acuerdan de cuando ellos la llevaron(la ele) porque la imbecilidad de estos papanatas no tiene límite y si lo hubiera o hubiese lo destrozarían a la velocidad de la luz por el carril de la izquierda adelantando en rotondas para avanzar un magnífico puesto que le ahorrará 5 segundos de su vida detrás de un novato que lleva tres semanas con el coche. Total que del impacto se me salió el intermitente delantero bajo izquierdo del coche, que la amable transeúnte por la que paré para dejar pasar en el paso de cebra de la discordia y que fue el origen de mi "porculada", me indicó que no estaba en su lugar, como si de un ojo salido o saliente colgando de las venas. Entre el jaleo de cláxones una chica en un coche negro con los labios rojos, no sé si del carmín o de la sangre que sus propios mordiscos provocaban por una rabia desatada a causa de esperar a un novato que ha "recibido" por primera vez me gritó "pero mueve el coche que &$&¡¡¡* ..." a lo que le contesté con la peor de mis caras(me cuesta poco ponerlas) que ARGH%&!!!!!... esa chica moderna no se había dado cuenta que todavía le adorna una preciosa boina con restos secos de paja.
Apartamos el coche y dirimimos el asunto o cuestión. Eso no es nada, dijo él. Eso del intermitente no hemos sido nosotros, dijo la experimentada mujer tricampeona del París Dakar. Y yo, el más tonto de los tres, pensativo, pensé que de un golpe por detrás no podría haber salido el intermitente de delante. No hubo parte.
Al final conseguí colocar el intermitente en el trabajo y cuando volvía a casa, casi con la sonrisa de lo que ya era una anécdota...



se me rompe de cuajo la llave del buzón al girarla y se queda dentro.




La gente que viene de fuera y dicen que los charros somos muy de pueblo...aciertan muchas veces.



Feliz Lunes.

2 comentarios:

skldá dijo...

Vaya, ya veo que tu día a comenzado igual de lindo que el mío... como se suele decir mañana será otro día...

besos

Anónimo dijo...

no tiene nada de malo ser de pueblo, digo yo...

lo bueno de los días malos es que hacen que existan los buenos... paradojas de la vida, ya ves...

besos... Mil... siempre


P.D. tengo ganas de cambiarte por una sudadera