domingo, 11 de agosto de 2013

Estío entre tus piernas

Tanta pasión que nos envasamos al vacío. Arrugamos nuestros pulmones con los ojos apagados y las maletas a medio hacer.
Ya no hay camino recorrido, sólo queda por recorrer.
Casi rompo mis dientes en tu cadera. Me has convertido en carnívoro acechándote agachado entre las sábanas.
Mudo cuando te miro, ciego cuando me tocas.
Muertos los dos cuando terminamos de.
Envueltos en sudor.

1 comentario:

Lucía V. dijo...

Increíble. He leído varias de tus entradas y todas me han sorprendido por igual.
Sigue escribiendo así, un beso.

http://lachicaconojosclaros.blogspot.com.es/