miércoles, 12 de junio de 2019

Tiempo y espacio (arena)

Ha pasado mucho tiempo desde la última vez.
Mis dedos tiemblan al plantar cara a un nuevo estío de celulosa que parecía en barbecho. Mi pecho palpita, cabalga sobre el tambor del llano, caballos fuera de sí pisando sobre sílabas sin saliva, sin salida entre trago amargo ahogado y malogrado.

Ha pasado mucho tiempo y sigo sin verte. 
Da igual amarillo o verde,
lejos o cerca, 
la valla que nos separa nos depara un reloj sin arena.
Lejos y cerca.

No duelen tanto las espinas de la verja.

1 comentario:

José A. García dijo...

Ciertas distancias duelen más que otra, sin lugar a dudas.

Saludos,

J.